En el mundo existen cien millones de niños que viven en la calle, según
Unicef. La mayoría se concentra en los países en vías de desarrollo, aunque no
es un problema exclusivo del Tercer Mundo sino que afecta también a países como
Estados Unidos. 40 de esos cien millones de niños viven en Latinoamérica; entre
25 y 30 en Asia y 10 millones en Africa. En algunas metrópolis de América
Latina hay más de 100.000 niños que viven en las calles, según el Programa de
las Naciones Unidas para el Desarrollo.
El fenómeno de los niños de la calle es fruto del imparable crecimiento
urbano, la pobreza y la falta de alternativas. Algunos huyen de la violencia en
su casa, otros se ven obligados a buscar trabajo porque sus padres no los
pueden mantener. Los niños que no han roto sus vínculos familiares, suelen
entregar sus ingresos a su madre para contribuir de esta forma a la economía
doméstica. Cuando la calle se ha convertido ya en su único hogar, suelen gastar
el escaso dinero que obtienen en comida, tabaco, drogas y en el juego, pero
también en ver películas o comprar juguetes. La imposibilidad de conservar sus
ingresos en un lugar seguro y el continuo miedo a ser despojados por sus
propios compañeros o por la policía, les impide ahorrar el dinero para poner
los cimientos de un futuro mejor.
La pobreza impide disfrutar de su infancia a millones de niños y de niñas
de todo el mundo. La pobreza les priva de las capacidades que necesitan
para sobrevivir, desarrollarse y prosperar. Les impide disfrutar la
igualdad de oportunidades. Aumenta su vulnerabilidad a la explotación,
el abuso, la violencia, la discriminación y la estigmatización. Los
datos estadísticos sobre los niños y las niñas que viven en la pobreza
nos enfrentan a una realidad terrible: millones de niños y de niñas son
pobres; carecen de acceso a agua potable, vacunas esenciales, educación y
nutrición; corren el riesgo de ser víctimas de la explotación y el
abuso.
Desgraciadamente, el término pobreza trae consigo otros,como es el del trabajo, y con él, el de la EXPLOTACiÓN INFANTIL, que es al mismo tiempo consecuencia y causa de la pobreza, aunando todas las miserias.
Agotamiento para vivir y trabajar, analfabetismo, enfermedades y malnutrición, envejecimiento precoz. Es el momento de romper esta espiral, que muchos se obstinan en considerar como una inevitable 'fase de crecimiento de las sociedades en vías de desarrollo'.
Pero el trabajo infantil no es todo igual. La misma UNICEF hace una nítida diferenciación entre dos tipologías de niños que trabajan:
Sus causas
La globalización económica crea lazos entre distintas economías nacionales, con lo cual la incidencia del trabajo infantil en países del Sur se hace más patente en los países industrializados. Al mismo tiempo, el proceso de globalización que permite al Norte ser consciente del trabajo infantil que se da en el Sur también pone presión a las economías y estructuras sociales de los países del Sur, intensificando de esta forma el problema del trabajo infantil.
Es evidente que existe una relación entre el trabajo infantil y la pobreza, puesto que los niños que trabajan son casi exclusivamente pobres. Pero la pobreza no es la causa del trabajo infantil; el hecho de que la proporción de trabajo infantil varíe dramáticamente entre países de niveles similares de desarrollo económico lo demuestra. El trabajo infantil sólo puede existir si es tratado como aceptable cultural y políticamente.
Según la Fundación Internacional por los Derechos Laborales, en muchos países hay una fuerte tradición de tolerar el trabajo infantil, que se combinan a menudo con prejuicios hacia poblaciones aisladas.
Entre los trabajos deexplotación más conocidos están: las minas de carbón en Colombia, pelotas de fútbol o materiales para grandes multinacionales, y la más denigrante de todas, la prostitución infantil.
Desgraciadamente, el término pobreza trae consigo otros,como es el del trabajo, y con él, el de la EXPLOTACiÓN INFANTIL, que es al mismo tiempo consecuencia y causa de la pobreza, aunando todas las miserias.
Agotamiento para vivir y trabajar, analfabetismo, enfermedades y malnutrición, envejecimiento precoz. Es el momento de romper esta espiral, que muchos se obstinan en considerar como una inevitable 'fase de crecimiento de las sociedades en vías de desarrollo'.
Pero el trabajo infantil no es todo igual. La misma UNICEF hace una nítida diferenciación entre dos tipologías de niños que trabajan:
- Aquellos que dentro de las familias campesinas o artesanas trabajan para ellas mismas y por la situación de pobreza, la falta de infraestructura o la ausencia de garantías sociales necesitan de los brazos infantiles. El niño puede trabajar algunas horas al día e ir a la escuela o en otros casos puede que trabaje todo el tiempo, pero no se puede hablar de explotación sino sólo de miseria.
- Aquellos en que son explotados por un patrón externo, muchas veces una multinacional.
Sus causas
La globalización económica crea lazos entre distintas economías nacionales, con lo cual la incidencia del trabajo infantil en países del Sur se hace más patente en los países industrializados. Al mismo tiempo, el proceso de globalización que permite al Norte ser consciente del trabajo infantil que se da en el Sur también pone presión a las economías y estructuras sociales de los países del Sur, intensificando de esta forma el problema del trabajo infantil.
Es evidente que existe una relación entre el trabajo infantil y la pobreza, puesto que los niños que trabajan son casi exclusivamente pobres. Pero la pobreza no es la causa del trabajo infantil; el hecho de que la proporción de trabajo infantil varíe dramáticamente entre países de niveles similares de desarrollo económico lo demuestra. El trabajo infantil sólo puede existir si es tratado como aceptable cultural y políticamente.
Según la Fundación Internacional por los Derechos Laborales, en muchos países hay una fuerte tradición de tolerar el trabajo infantil, que se combinan a menudo con prejuicios hacia poblaciones aisladas.
Entre los trabajos deexplotación más conocidos están: las minas de carbón en Colombia, pelotas de fútbol o materiales para grandes multinacionales, y la más denigrante de todas, la prostitución infantil.
UNICEF España es uno de los 36 Comités Nacionales que contribuyen al trabajo del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia.
Nuestro objetivo: garantizar que se cumplan los derechos de los niños a la salud, la educación y la protección en todo el mundo.
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) es la principal organización internacional que trabaja para promover los derechos de la infancia y conseguir cambios reales en las vidas de millones de niños.
Su labor se basa en la Convención sobre los Derechos del Niño, el tratado de derechos
Video: la otra infancia
Canción: Que canten los niños, Jose Luis Perales
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